lunes. 27.03.2023
"He tenido la suerte de ser invitado, curiosamente por un promotor eólico, a las jornadas eólicas que el Ayuntamiento de Aguayo organizó el pasado martes 29 en el centro cultural de la localidad. Y digo curiosamente porque, a pesar de que trabajé hace años, antes de dedicarme a mi actual ocupación en la producción agraria sostenible, en el sector de las renovables y especialmente en el de la eólica y minieólica, he firmado contra la implantación de diversos proyectos eólicos en mi tierra, la Ribeira Sacra de Galicia. Mi amigo promotor respeta mi postura como yo la de él y no tenemos ningún problema en debatir en este asunto. Aunque nací y resido en Galicia, conozco bien Cantabria y me gustaría que aquí no se repitieran errores que allí se han cometido en el desarrollo eólico.
 
Mi principal objeción a los proyectos eólicos a los que me he opuesto en mi tierra es la falta de información sobre los mismos y además entiendo que Galicia puede tener otros emplazamientos más adecuados que los que han elegido en la Ribeira Sacra para desarrollar proyectos.
 
No soy un “no a todo” ni mucho menos; por coherencia, como no quiero nuclear, carbón ni fracking en mi tierra y no quiero tener en mi casa velas y braseros, creo que tenemos que usar energías limpias, baratas y generadas en la propia comunidad y no veo mejor herramienta para ello que la energía solar fotovoltaica y la eólica, con todas sus limitaciones, de las que soy consciente. Tampoco creo que se nos pueda pedir mucho más a los gallegos, que tenemos más de 140 parques eólicos en funcionamiento y más de 100 en tramitación (Cantabria tiene 1 parque eólico en funcionamiento y unos 30 en tramitación).
 
En cuanto a la situación del Ayuntamiento de Aguayo, el planteamiento actual mete miedo y no se les puede pedir a los vecinos, por muy solidarios que sean, que aguanten cuatro líneas de alta tensión y 10 parques eólicos que rodean prácticamente el municipio. Personalmente no creo, y así lo deseo, que eso se vaya a aprobar en el órgano ambiental de Cantabria. 
 
Volviendo a las jornadas, me sorprendieron muy gratamente y he tenido sana envidia. Nada similar se ha organizado en la Ribeira Sacra, territorio aspirante a ser patrimonio de la humanidad de la UNESCO, para informar a los vecinos.
 
La organización fue casi perfecta y me llamó la atención el esmero del alcalde y la concejal responsable del evento en que todo se desarrollara en un clima de respeto a los participantes, sabiendo de la fuerte oposición en la zona a los proyectos energéticos (tienen de eólica, fotovoltaica y bombeo) encabezada por el propio alcalde y la citada concejal.
 
Hay que felicitar, sin que sirva de precedente, a los responsables políticos (consejeros de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, nada menos) que acudieron en persona sabiendo que eran, junto con los promotores, los malos oficiales de la jornada y que pocos piropos iban a recibir. Anunciaron una nueva legislación que, si no me equivoco, deja fuera del desarrollo eólico al 90% del territorio cántabro, que me parece mucho para cumplir unos mínimos objetivos de generación de energía renovable, pero supongo que lo habrán hecho con un criterio técnico. También anunciaron un canon urbanístico que podrá ser sustituido por unas tarifas eléctricas más económicas para los vecinos de los municipios que alberguen parques eólicos o solares. Me parece muy bien que el desarrollo energético traiga beneficios a los habitantes del rural. Los políticos aguantaron dando la cara ante los vecinos, que en algunos casos no fueron nada comedidos en sus exposiciones. Incluso me llamó la atención que el consejero de Ordenación del Territorio, una vez terminada la jornada, se dirigiese a los que se manifestaban en el exterior, que estaban en su derecho y lo hacían con total corrección, salvo por alguna pancarta que estaba fuera de lugar. Estuvieron dialogando un rato largo, cuando en mi tierra lo normal hubiese sido que el responsable político hubiese salido del lugar a toda prisa en el coche oficial. 
 
Después de la mesa redonda institucional se celebró la de las asociaciones y pudimos comprobar el contraste entre las opiniones de los ecologistas locales, que se oponen a cualquier desarrollo eólico en Cantabria, con una postura un tanto arcaica del tipo “que inventen ellos” (¿se imaginan a los conservacionistas castellanos diciendo que los residuos de allí se lleven a Cantabria ya que ellos generan energía eólica y solar para los cántabros?, entraríamos en el debate de la insolidaridad) frente a las de asociaciones ambientalistas con miras más globales que reclamaban que todos debemos hacer un esfuerzo para cambiar el modelo energético y el no hacer nada provoca impactos en otros lugares del mundo que también nos terminan afectando, como se ha podido comprobar actualmente con la dependencia del gas ruso (o argelino), ahora sustituido por gas de fracking “made in USA” que consumimos sin rubor. En esta mesa redonda el malo “oficial” era el representante de la Asociación Eólica Española que, sin embargo, articuló una exposición coherente, defendiendo lo mucho bueno que tiene la eólica, ante un auditorio poco receptivo.
 
La tercera y última mesa redonda fue la de los promotores eólicos y la representante de la empresa titular del proyecto de ampliación del bombeo de Aguayo, es decir, los “enemigos” (perdonen la broma) actuales. Salvo uno de ellos que entró a pormenorizar los aspectos ambientales y sociales de un proyecto eólico en concreto, el resto habló de generalidades que no aportaban mucho.
 
Los moderadores hicieron un buen papel teniendo en cuenta que, más que preguntas, buena parte del público hizo mini discursos exponiendo sus posturas personales y no había tiempo para todo.
 
Lo único desagradable de la jornada ha sido la reacción de ciertas personas en las redes sociales, atacando rabiosamente al Ayuntamiento y sus representantes por haber permitido ¡qué atrevimiento! que las autoridades y los promotores eólicos expongan sus planteamientos a los vecinos. Precisamente lo que estamos demandando en Galicia desde hace meses. Esta gente de las redes sociales, que no son mayoría, debería reflexionar y cambiar su actitud tan fascista e intolerante. El pensamiento único no es el camino. La información siempre es necesaria y nunca sobra. Después cada cual asimilará lo allí expuesto y formará su opinión, que será tan respetable como la de los demás. 
 
En definitiva, enhorabuena al Ayuntamiento por la jornada. Les deseo la mejor suerte y que lo que finalmente se haga en el municipio no tenga nada que ver con lo ahora planteado. Estaría bien que en unos meses hicieran otra jornada de seguimiento de los proyectos, porque la información es la mejor herramienta para defender los derechos de los vecinos. Si la celebran espero volver."
 
Fdo: Julio Quiroga, emprendedor del sector agrícola 

"Energía eólica en San Miguel de Aguayo", por Julio Quiroga